sábado, 10 de julio de 2010

POLIFONETO DE LA VIDA

La vida perecedera y mudable,
nos da el consuelo de su hermosura,
al saber que toda nuestra amargura,
depende de la materia perdurable.

Desde nuestra espera interminable,
vamos hacia la esperanza oscura,
buscando aquella celestial figura
que nos muestra la belleza admirable.

Consolados por la palabra amable
y el cariño de toda criatura,
vamos corriendo hacia la sepultura
donde empieza la vida perdurable.

Cuando el alma se encuentre liberada,
y la vida abandone su envoltura,
resplandecerá toda la hermosura
de la eternidad,que es tan esperada.

Anselmo Prada

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