De la vejez yo quiero hablar,
del mal trato que reciben
de la familia y de la sociedad,
aunque no son todos igual.
Ser viejo no significa
ser inútil o incapaz.
ni mentalmente tarado,
solo es tener cierta edad.
En el mayor se juntan
la prudencia y la sabiduría
y la experiencia que le da al viejo
cierta categoría.
En el Antiguo Testamento,
cuando habla de los viejos,
su imagen siempre resalta
por su prudencia y consejo.
La prudencia y la bondad
que en un viejo podemos encontrar
todo el mundo la conoce
solo el necio la ignorará.
Cuando hablamos de los viejos
y la filosofía que encierran
solo dicen que contamos
batallas de otras guerras.
El viejo no quiere privilegios
ni mendigar el cariño,
que lo respeten por viejo
y no lo traten como niños
es lo único que le pido.
Esto es lo que piensa el viejo Anselmo
que ha tenido la suerte de llegar a viejo
y hoy se encuentra muy contento
porque va a celebrar sus 90 años de edad-
No hay comentarios:
Publicar un comentario